En una operación denominada “Oro Rojo”, liderada por la Policía de Investigaciones (PDI) en conjunto con el Ministerio Público, se logró desbaratar una organización criminal dedicada al robo, comercialización y exportación ilegal de cobre.
La banda, que la integraban, al menos, una veintena de personas, operaba en diversas ciudades de Chile, incluyendo Coquimbo, Calama y Santiago, y extendía su red hacia varios países como India y Bélgica.
Según detalló la PDI tras un año y medio de indagaciones se logró detener e imputar a 18 personas, entre ellas, 7 extranjeros.
Al respecto, el prefecto inspector Ernesto León, explicó que la organización, que era liderada por un empresario vinculado a la política regional, inició sus operaciones en la zona, donde se detectaron los primeros casos de receptación. Luego el material era trasladado a Calama, y finalmente a fundiciones en Santiago. Desde allí, los cables eran procesados y exportados.
“Se incautaron 160 millones de pesos en efectivo, 10 vehículos, moneda internacional y un par de motocicletas”, detalló Ernesto León.
A su vez, el fiscal regional, Patricio Cooper, aseveró que este golpe que hemos dado junto a la PDI es la punta de lanza. “Si bien los cabecillas son de Coquimbo se trata de sustracción de cobre en el norte del país”, subrayó.
Por su parte, el delegado presidencial regional, Galo Luna, destacó que este delito fue priorizado por el Consejo contra el Crimen Organizado, debido a su alto impacto en la vida cotidiana.
