La censura en la libertad de expresión es la acción de limitar, prohibir o controlar lo que una persona puede decir, escribir o comunicar, afectando su derecho a expresarse libremente. Esta censura puede ser impuesta por gobiernos, empresas, instituciones o plataformas digitales, y suele aplicarse a ideas, opiniones, obras artísticas, noticias o información que se consideran incómodas, peligrosas o contrarias a ciertos intereses.
En resumen:
La censura es una forma de control que impide que las personas expresen libremente sus pensamientos, y por eso entra en conflicto con el derecho a la libertad de expresión.
¿Es siempre negativa?
No necesariamente. Existen límites legales válidos a la libertad de expresión, como prohibir mensajes que:
Inciten al odio o la violencia.
Difamen a otras personas.
Comprometan la seguridad nacional.
La clave está en que estos límites deben ser razonables y no usarse como excusa para silenciar opiniones legítimas.