Una obra de tanta complejidad y envergadura no podía estar exenta de trabas iniciales y de algunos obstáculos operativos o administrativos que pusieran a prueba las primeras partes del proyecto.
Y es que la construcción del nuevo hospital de La Serena, el cual será un hito importante en el área de la salud de alta resolutividad para la Región de Coquimbo, ha tenido que superar diversas trabas desde que se anunció, en julio del año pasado, cuando ya estaban los recursos, planos y proveedores listos para el inicio de la obra.
En efecto, tras las primeras labores en terreno, los inconvenientes no tardaron en aparecer.
En noviembre de 2024 las obras fueron paralizadas debido a una denuncia vecinal que – acogida por la municipalidad serenense – dispuso que se suspendieran las labores hasta tanto se mitigara la polución debido a la remoción de tierras y del constante paso de camiones y vehículos por la zona.
La empresa encargada de las labores entregó un informe de 200 páginas en el que detalló las actividades y obras de mitigación que realizarían en el recinto para garantizar que la polvareda no afectara más a los vecinos, y luego de la pavimentación de algunos tramos de acceso, se pudieron reiniciar los trabajos.
Otros trámites ante el Primer Tribunal Ambiental han intentado paralizar momentáneamente las obras, tras considerar que no se hubiesen cumplido los pasos que garantizarían la protección del medio ambiente, pero tras la revisión del caso, se han sabido sortear los obstáculos y retomar el ritmo de trabajo.
En marcha
Actualmente, y luego del análisis hecho por las autoridades, el nuevo Hospital de La Serena registra un 4,81% de avance al 23 de mayo de 2025, ya que sus labores de excavación masiva estarían casi concluidas y ajustadas al cronograma presentado.
En la actualidad se están ejecutando trabajos de refuerzo de taludes, ejecución de fundaciones aisladas y pedestales (pilares nivel -1), radieres, muros de contención y redes soterradas de protección contra incendio, y alcantarillado, entre otros.
Es de recordar que la obra contempla una superficie de 125.284 m2 y, conforme a plazos vigentes, se proyecta su término para el segundo semestre de 2028, todo esto tras una inversión que supera los 271 millones de dólares.
El futuro recinto de alta complejidad tendrá capacidad para 671 camas (668 más 3 camas UCI Pediátrica), distribuidas en 149 para pacientes críticos, 332 camas médico-quirúrgicas, 90 ginecoobstétricas, 48 pediátricas, 18 neonatológicas y 34 para psiquiatría de adulto. El recinto contará con 15 pabellones, 85 boxes de consultas médicas, dentales y no médicas, 6 salas de atención integral del parto y un servicio de urgencia.
Cabe indicar que la obra beneficiará a más de 723 mil usuarios, pertenecientes a las comunas de La Serena, La Higuera, Vicuña y Paihuano.
Al respecto, el seremi de Obras Públicas, Javier Sandoval, valoró los avances de la obra, por la complejidad que conlleva y por los escollos que ha debido superar.
“Debemos señalar que estamos conformes con el avance de esta gran obra que, recordemos, es un proyecto muy esperado por la región y en particular por la comuna de La Serena, ya que viene a transformar la calidad de vida de los habitantes, poniendo tecnología e infraestructura de punta al servicio de la salud pública al alcance de todos”, puntualizó el seremi.
