Recientemente se conocieron los resultados de la Prueba de Acceso a la Educación Superior (PAES) donde una vez más se evidenciaron significativas brechas y desigualdades educativas a lo largo y ancho del país. Las brechas entre tipo de establecimientos, así como las de género en matemáticas y comprensión lectora, y también las referentes a la preparación académica, dan espacio a la reflexión sobre cómo podemos apoyar a los estudiantes y potenciar sus aprendizajes.
En esa línea, un elemento clave es el rol que desempeñan los profesores en el sistema educativo y cómo impulsarlos trae consigo un efecto multiplicador y “de dominó”. La evidencia muestra que un profesor que cuenta con herramientas pedagógicas efectivas y atractivas tendrá una mejora en la calidad de la enseñanza. Por otro lado, quienes adquieran herramientas en el fortalecimiento de habilidades socioemocionales de sus alumnos, prepararán jóvenes con mayor motivación, compromiso y más preparados para los desafíos de este siglo.
Con ese objetivo en mente, y con la idea de impartir metodologías activas para identificar problemas y desarrollar soluciones innovadoras centradas en las personas, la Escuela de Diseño de la Universidad de Stanford d. School y Fundación Luksic impartieron el curso “Design Thinking: Diseñando el Futuro del Aprendizaje” a más de 30 docentes de establecimientos técnico profesionales del país.
El curso -que se realiza por primera vez en Chile y que responde a la estrategia del área de Formación Internacional de la Fundación de acercar programas de alto nivel de instituciones extranjeras, es impartido por Leticia Britos y enseña cómo a través del diseño se puede no solo resolver problemas, sino también fomentar la capacidad de innovar y explorar nuevas formas de pensar, algo esencial en un mundo que demanda adaptabilidad y visión a futuro.
Los docentes participantes son parte del programa Redes Educativas para la Mejora de Aprendizajes (REMA) de Fundación Luksic, que busca apoyar la formación de los docentes y directivos de establecimientos técnico profesionales (TP) del país para que puedan potenciar los aprendizajes de lenguaje y matemáticas de jóvenes de primero y segundo medio, es decir justo antes de que empiecen la modalidad en sus especialidades TP.
La experiencia y resultados del Liceo Fernando Binvignat Marín de Coquimbo
El establecimiento Liceo Fernando Binvignat Marín de la comuna de Coquimbo es parte de los más de 40 liceos de diferentes partes de Chile que han pasado por el programa REMA de Fundación Luksic. La Jefa de Unidad Técnica Pedagógica, Ana Chepillo, comenta que la participación del liceo ha sido fundamental.
«La experiencia con REMA fue excelente desde el momento uno y muy poderosa. Los componentes que trabaja como el acompañamiento en el aula, para observar los métodos pedagógicos de los profesores y el desarrollo de emociones, ha sido fundamental para nuestro trabajo en el liceo. Nos ha permitido implementar planes de acción, instalar una cultura de refuerzo positivo y de mejora continua en los profesores», cuenta la jefa UTP.
Dice que el programa les dio mucho protagonismo a los profesores y que quedaron muy conformes y que hubo una mejora importante en muchos indicadores: “Nosotros postulamos a un proyecto a la ADECO (Asignación de Desempeño Colectivo) del Mineduc sobre el acompañamiento en el aula y tuvimos una evaluación destacada. Mejoraron los resultados de los estudiantes, hubo un alza de eficiencia interna, un cambio de actitud de los estudiantes, donde se les ve más comprometidos y motivados para mejorar su aprendizaje», dice con orgullo.
Un liceo que apunta a la excelencia académica
La directora junto a otros seis docentes viajaron desde Coquimbo a Santiago para empaparse del aprendizaje de la experiencia del curso de la Universidad de Stanford. “El curso fue una tremenda experiencia, quedamos fascinados porque nos entregó mucha herramientas para trabajar con los estudiantes. Es fundamental introducir la innovación en el sistema educativo y el Design Thinking es una gran herramienta. Nosotros debemos trabajar para que los alumnos se acerquen a la tecnología, sean capaces de reflexionar y también que los profesores se interesen en aprender y aplicar nuevas metodologías», explica Ana.
En el ámbito educativo, el Design Thinking empodera a los docentes para que sean agentes de cambio en sus aulas. Esta metodología les permite experimentar con nuevas estrategias de enseñanza que estimulan el pensamiento crítico y creativo de los estudiantes, ayudándolos a alcanzar su máximo potencial.
Sobre el curso y este metodología, la directora de Educación de Fundación Luksic, Fernanda Orellana explica que “al abrir la mente a soluciones no tradicionales, esta forma de pensamiento transforma la educación en una herramienta poderosa para preparar a las comunidades y a las nuevas generaciones para enfrentar los desafíos del futuro con creatividad e innovación”, explica Fernanda Orellana, directora de Educación de Fundación Luksic.